Se caracterizan por sus frutos pequeños, parecidos a la manzanas y sus ramas espinosas. Las frutas se conocen a veces como "tejocote". El nombre de "espino" fue aplicado originalmente a la especie natural del norte de Europa, especialmente el espino común, espino albar o majuelo (C. monogyna), pero ahora se aplica al género entero, y también al género asiático relacionado Rhaphiolepis.
Estos arbustos o pequeños árboles, en su mayor parte crecen hasta 5-15 m de alto,2 y forman pequeños frutos en forma de pomo y (normalmente) ramas espinosas. El tipo más habitual de corteza es gris suave en los ejemplares jóvenes, desarrollando fisuras longitudinales con crestas estrechas en los árboles de más edad. Las espinas son pequeñas ramillas apuntadas que se alzan bien de otras ramas, o bien desde el tronco, y tienen típicamente 1-3 cm de largo (se han documentado de hasta 11,5 cm en un caso.2page 97). Las hojas crecen en espiral dispuestas en largas ramas, y en racimos en los brotes con espinas o ramillas. Las hojas de la mayor parte de las especies tienen márgenes lobulados o serrados y son de una forma algo variable. El fruto tiene forma de baya, pero estructuralmente es un pomo que contiene de 1 a 5 semillas que se parecen a huesos de ciruelas, melocotones, etc. que son un fruto drupáceo en la misma subfamilia.